La tierra, sustrato de la vida
Durante el periodo colonial en México ocurrió una severa sequía que abarcó casi todo el territorio de la Nueva España entre 1785 y 1786, ocasionando la más grave crisis agrícola experimentada hasta entonces. La sequía y la consecuente escasez y carestía de los alimentos desencadenaron una espiral inflacionaria que duraría 20 años. Aunada a los descontentos sociales y a los problemas políticos existentes tanto en la Nueva España como en la metrópoli, la sequía es considerada uno de los factores que desencadenaron la guerra de independencia de México a principios del siglo XIX.