El calentamiento global está devorando las costas del Ártico, donde erosiones de hasta diez metros al año están afectando a poblaciones humanas y amenazando la supervivencia de especies locales de plantas y animales.
Esta es la principal conclusión de un doble estudio hecho público por un consorcio de treinta científicos de diez países que ha analizado la situación de 100 mil kilómetros de costa o cerca del 25 % de las fronteras terrestres de los ocho países que lindan al norte con el océano Ártico.