 Presa en Villa Hidalgo, Jalisco. |
Francisco Aguiar Barajas
Luego de advertir que el presente temporal de lluvias se ha convertido en el año más húmedo de los últimos 69 años (1941), ya que al 30 de septiembre se registraron precipitaciones de 852 milímetros cúbicos de agua, superando en 44 por ciento los 590 milímetros cúbicos en promedio, el titular de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo, aseguró que las 100 presas más importantes del país se encuentran a su máximo nivel, y su desfogue se ve limitado por la invasión de los cauces de los ríos.
Luege explicó que la dependencia a su cargo trabaja de manera coordinada con las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de Desarrollo Social (Sedesol) para aplicar acciones e impulsar políticas públicas encaminadas a liberar de asentamientos humanos irregulares las zonas federales aledañas a los ríos, así como laderas y otras áreas de riesgo.
Ante este panorama, señaló la necesidad de comenzar el reordenamiento territorial con la liberación de los cauces de ríos y arroyos, laderas, pendientes con más de 40 grados de inclinación, así como las zonas naturalmente inundables, entre otras, con el fin de disminuir los riesgos de inundación para quienes habitan en ellos.
Detalló que los asentamientos humanos ubicados en áreas federales inundables no sólo enfrentan riesgos de anegaciones, sino que también obstaculizan las estrategias para el desalojo de los embalses del país, con lo que generan peligros para las poblaciones ubicadas aguas abajo de estas presas.
Por su parte, Felipe Arreguín Cortés, subdirector general técnico de la Conagua, insistió en la importancia de mantener los embalses con la capacidad suficiente para hacer frente a las precipitaciones que se generen durante el resto de esta temporada de ciclones 2010, debido a que aún se espera el desarrollo de 13 fenómenos, ocho de ellos en el Pacífico y cinco en el Atlántico.
Ante esto, el Comité Técnico de Operación de Obras Hidráulicas (CTOOH) -órgano colegiado encargado de tomar las decisiones respecto al manejo de las presas e integrado por expertos de dependencias como la Comisión Federal de Electricidad, el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), entre otros- enfrenta grandes retos, esto debido a que debe determinar el nivel de desalojo de los embalses para disminuir los riesgos de desbordamientos, al tiempo que mantiene la seguridad de las grandes poblaciones asentadas aguas abajo, como es el caso de las ciudades de Villahermosa, en Tabasco, o Reynosa, en Tamaulipas.
Con el objetivo de iniciar un programa de reordenamiento territorial que contribuya a incrementar la seguridad de la población, Luege Tamargo apuntó que la Conagua se coordina con la Sedesol para gestionar créditos accesibles a quienes habitan en asentamientos humanos irregulares, con el fin de que adquieran viviendas de un costo similar al de las actuales, pero ubicadas sólo en sitios seguros frente a anegaciones.
Fuente: El Occidental
